08 noviembre 2025

 

 


 

“Autorretrato de una que no soy yo, mi madre” óleo sobre tela - 100 cm x 100 cm

La pérdida del contacto con otros y otras de manera presencial, representa el tiempo sin los seres queridos y el tiempo vivo en pandemia, la mirada se vuelve fundamental; porque mirarnos se volvió un acto de búsqueda, encontramos con los y las otres que nos rodeaban cuando tapados, con mascarillas, salimos la vida, el encuentro con mi madre durante el 2020 y el 2021 fue a la distancia, faltaron abrazos, encuentros en la mirada, compartir, sentir el calor del cuerpo. Fue en ese momento, donde pintar se volvió una pulsión y un aprendizaje. Buscar su mirada, mi mirada, la mirada del vecino. Transitar la pandemia implicó la pérdida de seres queridos que son presentados como líneas rojas que cruzan el autorretrato, como un tapiz lejano, como una pared empapelada, con un paisaje de fondo difuso, que podría ser un cuadro o una ventana, pero será la mirada del espectador quién deberá completar la imagen. Pintar a mi madre, durante tu encierro y luego su partida es el corolario de una búsqueda autorreferencial que siempre remite al mismo lugar, ser yo mismo.


 Autorretrato Digital - Nada es real. (2025)

 


 
 
"Autorretrato con Rocco en el taller"  2014 - 100 x 70 cm - acrílico s/tela.
 
Premio adquisición concurso "Arte y Salud" de Accord Salud.
Se acercaba la fecha para presentar la obra en el concurso, venía trabajando un autorretratos, pero no terminaba de definir y no se me ocurría como pintar un nuevo autorretrato, tenía un par de obras pero no me convencían. Y en casa, mi gato, mi compañero de noches de pintura, Rocco había enfermado (tenía 16 años y problema renales) me di cuenta que nunca lo había retratado y comencé la obra. A pocos días de presentado el cuadro en el concurso, Rocco partió al cielo de los gatos, y recibí la noticia de la selección.
Ahora, retratados juntos, vamos a estar colgado en el Instituto Quirúrgico del Callao.

Con el maestro Felipe Pino (parte del jurado)
.